lunes, 21 de octubre de 2013

Last Minute Cellagua

Artículo escrito por Zape, sobre la única repetición conocida de la travesía del Bloque Cellagua y seguramente la última.


Pocos días antes de comenzar la desinstalación de cellagua programada para este fin de semana: “tururututu”, mensaje de Cristóbal:
“¿Por qué no hacemos la Travesía Bloque-Cellagua antes de desinstalarla? Estaría bien, hay que recordar los viejos tiempos, muchos de vosotros no la conocéis, los que la conocen podríais recordarla, es una maravilla, no hay mucha agua estos días, el Pisuerga pasa por Valladolid, mi abuela fuma en pipa…..”



Organizamos la salida durante la semana y solamente falta la confirmación de Moisés que acaba de ser papá y el retoño esta muy tierno…

Total que cinco descerebrados nos encontramos el sábado en la boca del Bloque tras madrugar un poquito más de lo normal, cosa por la que “protesto enérgicamente”.
Allí estamos Cristóbal, Moisés finalmente, José Gambino, Marta y Zape.
Dejamos el coche en Entremazos y pasamos mirando de reojo la depresión de Cellagua,  ya que el día anterior ha llovido mucho en la costa, pero el Mortillano está casi seco.
A las 11 estamos entrando por la boca del Bloque con bien de material ya que la travesía se equipó para doble hace unos 10 años y que sepamos, pocos o nadie la ha repetido.
La progresión es más o menos rápida en los pozos y todas la partes de sube y baja, progresa en horizontal, vuelve a bajar, vuelve a subir…. Hasta que llegamos a la zona del antiguo vivac.



Un rato de descanso, comemos y vemos una galería lateral con formaciones bien guapas.
A partir de aquí empieza el juego, hasta ahora sólo estábamos calentando.
Pronto encontramos un P-52 y tras él, el pozo de “La Galerna” ¿Porque le habrán llamado así? jia jia jia. 


 
El Mortillano está casi seco pero la poca agua que hay cae justo encima de nosotros. Ya bien mojados comenzamos a disfrutar de varios meandros con sugerentes nombres al más puro estilo Spa soviético: “La ruta sangrienta”, “Las agujas”, “Stalingrado”… Golpecito en la costilla, espinillazo, toque en el codo, agujita pinchando la rodilla, un trocito de barro que me entra por el cogote, arena en un ojo…
 
 Pero… ¿por qué no nos hemos puesto ya los neoprenos?, quedan varias horas hasta la zona de nadar y ya estoy mojado hasta la cintura, otros hasta el cuello. Viéndolo así parecemos tontos (que lo somos), pero alguno opina que es preferible mojarse a morir con el neopreno puesto en estos sitios tan… (digamos) “cómodos”.




A pesar de todo la zona es muy chula. Paramos a hacer alguna foto intentando que Cristóbal no salga movido.

Seguimos subiendo y bajando continuamente y realizando alguna oposición bastante simpática.
Los que no conocemos la travesía bajamos pensando en las exploraciones realizadas en esta zona. Las puntas de exploración realizadas entrando el viernes y saliendo el domingo por la tarde fueron de seguro bien duras y el pellejo de los exploradores también “bien grueso y áspero”. Una reverencia…

Finalmente llegamos a la zona donde por fin sí hay que ponerse algo de “abriguito”. La zona inundada es de nadar un rato largo y los que llevamos neopreno fino echamos de menos algunos milímetros más de confort.
Atracamos en la base de los pozos de Cellagua, nos cambiamos rápidamente, y nos ponemos de nuevo nuestras ropas mojadas para salir disparados hacia la calle.
Por los pozos baja una corriente de aire fresco que en los pozos de entrada es heladora.
Salimos a la calle y la nariz se nos queda como un cubito de hielo antes de llegar al coche a eso de las 10 y cambiarnos entre tiritones.

La travesía Bloque-Cellagua no es y parece que no tiene pinta de poder ser una “clásica del Asón”. Si no se va un poco “alegre” te come el tiempo y el frío. Existe una descripción de ella muy completa en la web del AER:
La travesía fue realizada junto a un “aborigen” explorador de la sima por lo que los tiempos pueden no ser del todo reales.

Por lo demás un grato recuerdo.
 “Adiós Cellagua, adiós”, …o no..

lunes, 7 de octubre de 2013

Adiós Cellagua Adiós

Sabado 21 de septiembre de 2013

A primeros de agosto Pedro y yo dejamos la punta de exploración de esta nueva red de Cellagua, en un cañón desfondado que precisaba pasamanos y cuerdas largas.
De nuevo volvemos en septiembre para desvelar esta incógnita, que como siempre en la espeleo nos puede conducir a nuevas galerías que desciendan hacia sur o sumirnos en un agujero entre bloques que ponga fin a las exploraciones.
De momento nos hemos juntado cinco, lo que facilita bastante el transporte del material que entre unas cosas y otras suma bastante , incluso Pedro Hierro que había jurado no volver mas está aquí de nuevo..
El día se promete caluroso y calienta mientras nos cambiamos en la boca, si le hubiéramos hecho caso a Cristobal que quería quedar a las 08:00 de la mañana no nos pasarían estas cosas. Total que a las 11:00 entro el ultimo en la sima para ver como Cristobal mete prisa a Pedro en el descenso y este le recuerda que solo tiene dos velocidades “ la lenta y la muy lenta”.

El nivel del río en el cañón de cellagua esta algo mas alto y casi todos se mojan los pies , salvo los cojos saltarines. Tras casi 4 horas llegamos a la zona de punta despues de  remontar varias escaladas y aguantar algunos ataques de risa que provoca la sabiduría popular de Pedro.
Zape y yo nos quedamos un poco antes para repetir por tercera vez la escalada que lleva a la galería de la vertebra , que esta vez espero fotografiar bien y sacarla en un bote estanco con esponjas , que como todos nos tememos no será suficiente para que sobreviva al viaje. Cumplida nuestra misión y tras desinstalar de nuevo esta escalada, nos dirigimos de nuevo con el resto de la tropa, que mientras tanto ha tenido que soportar un ataque de furia de Marta, que no entiende por que solo hemos puesto un spit en una cuerdita de ayuda y nos llama de todo..

Esto unido a la bronca que nos soltará posteriormente Nuria por no conseguir sacar el hueso en buenas condiciones, dejan nuestra autoestima por los suelos , claro que las relaciones con el sexo femenino nunca ha sido el fuerte del AER.
Cristobal ataca el pasamanos con dbz y Zape tras su deporte habitual de tirar bloques, instala el desfonde en su inicio.
Ninguna de las dos instalaciones culmina con éxito y ambas se cierran, lo que en la practica parece poner fin a estas exploraciones y por ende al idilio del AER con Cellagua tras mas de 23 años de relaciones tormentosas pero fructíferas en las exploraciones.
foto de Marta

Recogemos todo y desinstalamos alguna de las escaladas volviendo con el rabo entre las piernas y las sacas llenas. Pero como nos cuesta renunciar a esta sima, miramos y remiramos los rincones en busca de una continuación por algún lado. Una escalda sobre coladas y con un pocete en su base aportan algunos metros mas de topo pero no consiguen abrirnos nuevas puertas.
foto de Marta

Llegamos así a la escalada de 25 que da acceso a esta galerías de Cañete y Zape se va a miara el pozo lateral de 20 m. que los primeros exploradores dieron por terminado. Como suele pasar en este negocio nada es lo que parece y el pozo no es tal y tienen una galería al otro lado que se alcanza bajando entre bloques, le sigo y vemos que la galería de buen tamaño termina unas decenas de metros después en un gran pozo o mas bien casi seguro que se trate de las galerías sobre el pozo Balourd, ya que se oye lejano el chorro de agua que cae por el pozo.
Hemos dejado una galería colgada que precisa trepar y mientras Pedro baja hasta el Balourd para ver si nos ve o nos oye, y Marta y yo hacemos la topo, Cristobal y Zape escalan hasta la galería que poco después cae también sobre la gran galería de Balourd.
Así pues esta vez si que se termina todo y solo nos queda desequipar la escalada y los trepes barrosos que la preceden, cosa que nos ocupa hasta las 21:00 y termina de cargar las sacas con mas material.
Foto de Marta

Se inicia el lento camino de regreso en el que aun paramos para hacer alguna foto de despedida de las galerías de borgoñeses, donde casi seguro que no volveremos a poner los pies, lo que me provoca sentimientos contradictorios por haber terminado una larga y dura etapa en mi historia espeleológica y saber que seguramente sean los últimos pasos que doy en estas bonitas galerías.
Foto de Marta
Foto de Marta

Son las 23:00 cuando iniciamos el ascenso por las cuerdas de Cellagua al ritmo que nos marca Pedro en cabeza, que de nuevo es azuzado por Cristobal pegado a su trasero, cosa que por otro lado no consigue que Pedro varíe su ritmo lo mas mínimo y que yo agradezco.
A las 01:30 estamos todos fuera tras casi 14 horas y solo nos queda volver al coche, pisando el rocío que ya cubre la yerba en esta época del año. No quedan bares abiertos donde ahogar nuestras penas , así que una vez en Ramales , cada mochuelo a su olivo y a esperar las agujetas del domingo que amortiguaremos con unas cañas..

Adiós Cellagua adiós..