jueves, 12 de diciembre de 2019

Maza del cuivo. Rematando_nos



26-10-2019                        Por Enrique Ogando

Tras la anterior incursión de Gelo y Cristóbal, la escalada de “Marta y sus Machotes” está continuando de nuevo pero descendente, en una vía paralela, aunque según los últimos datos de topo introducidos parece que nos llevan a zona conocida.




Así que allí que nos reunimos para comprobarlo Cristóbal y Zape en el horario habitual. El tiempo es bueno y estable y no ha llovido mucho en los últimos días.
 De camino nos acompaña un mastín que andaba cuidando vacas y ha preferido darse un garbeo con nosotros. ¿Que se preguntará cuando desaparecemos por la gatera? 

Una vez más los pozos descendentes, los meandros habituales, el ascenso por los pozos de la escalada y una parada técnica para comer. En la zona alta donde dejaron el último día el material, tenemos que recuperar una cuerda en doble y cargar las sacas con cuerda y material.
Queda una cuerda más, ¿la cargamos?
Pensamiento: si la llevamos la vamos a tener que cargar de vuelta sin haberla usado, si no la llevamos, nos va a hacer falta.
Pensamiento: La topo dice que vamos a conectar enseguida, la cueva va a decir lo que le salga de los cojones.
Decisión: no la llevamos…
La zona nueva no es muy amplia, pero nos deja algunos alivios y al menos no es fea. Tras el pozo de 17 que dejaron los anteriores, son pequeños pozos y resaltes los que tenemos que equipar. Intentamos equipar lo mínimo y destrepamos algunas obstáculos intentando economizar, pero la cueva ha leído nuestros pensamientos y hemos sobrepasado la zona donde debíamos conectar y claro nos hemos quedado sin cuerda.
Salimos haciendo topo e instalando los resaltes que deberemos equipar con cuerda el próximo día y retocando alguna deficiencia en los pozos de entrada.
El resto ya se sabe, a cenar…
Una vez pasada la topo en casa, vemos que nos acercamos a conectar con otra zona, se supone conocida, JA JA.

lunes, 23 de septiembre de 2019

Huyendo del Sur

Sima de la Maza en Soba Sabado 21 de Septiembre de 2019


El personal está disperso, por lo que solo estamos Cristóbal y yo para hacer alguna actividad espeleológica. Decidimos ir a la Maza, ya que el tiempo está de sur y hasta el domingo no dan lluvia.
Por tanto a las nueve estamos en el club preparando algo de material y para las 10:30 ya en la boca, después de una parada para el café en La Gándara.


El descenso por los habituales meandros, gateras y laminadores acuáticos se realiza con calma, comentando las actividades del verano. El ascenso por el meandro desfondado sigue siendo igual de penoso y para las 12:00 estamos en la gran sala, que recibe el río desde el norte.
Continuamos hacia el noreste por las galerías fósiles, ventiladas con sus resaltes equipados y llegamos a la base de la larguísima escalada de “Marta y sus Machotes”, que asciende varios pozos encadenados hasta más de 190 m. Casi al final, tenemos pendiente de explorar una vía de pozos descendente, que parece tomar otra dirección y que esperamos nos pueda dar alguna alegría.
Llegar hasta el inicio de esta vía nos ha llevado otra 1:30 y es hora de comer, por lo que paramos 15 minutos para alimentar el cuerpo.
Mientras Cristóbal sube más arriba a revisar la zona, yo recojo el material allí depositado y comienzo el descenso de la vía, que ya exploramos parcialmente Zape y yo en el pasado hasta unos pozos amplios, que desequipamos para usar el material en otras partes de la sima.



 


💀💀Llego a un resalte que destrepamos la otra vez, pero que finalmente decido equipar por más arriba. Cristóbal se me ha unido con el resto de cuerdas y seguimos bajando por un meandro, estrecho pero transitable, hasta la cabecera de un pozo de 18 m. que ya bajamos con anterioridad. Lo reequipo y más abajo añado un fraccionamiento hasta llegar a la base del amplio pozo, donde otro corto resalte precisa ser equipado.
Hasta aquí llegamos la última vez y en frente veo una pared lisa, con inclinación bajo la que se ha generado una línea de pozos, que tiene pinta de ser una falla.
Instalo varios resaltes con cuerdas muy justas, aprovechando como puedo el escaso material disponible, hasta que 30 m. más abajo llegamos a un meandro que parece muy estrecho y que me temo se cierre.
Nos acercamos y el meandro es penetrable lo que nos anima mucho. Más adelante se abre y hay que destrepar un poco, hasta la cabecera de un amplio pozo de 17 m., para el que no tenemos cuerda, así que es el fin de nuestra exploración por el día de hoy.
 

Ascendemos topografiando,  haciendo alguna foto y para las 18:15 estamos de nuevo en el inicio de la vía, comemos un poco más y comenzamos el descenso, para llegar a la gran sala sobre las 19:45, bebemos un poco y de vuelta para el exterior por la gincana de meandros y pozos.





 






domingo, 15 de septiembre de 2019

Fuente Fria 2019

19 al 26  del 07 de 2019


De nuevo este año hemos realizado la 18 edición del campamento de Fuente Fría .Los años pasan y cada vez somos menos los motivados para pasar una semana entre las nieblas y lapiaces de la zona.
Pero el viernes 19 de Julio con buen tiempo, nos juntamos unos 10, para subir y montar el campamento y cenar juntos en el paraje incomparable de la fuente que nace bajo el haya.
El fin de semana aun contamos con bastantes miembros para hacer varias actividades, de prospección y exploración en la FO1, en la que llevamos trabajando ya desde hace dos años.
El resto de la semana solo quedamos 5 personas para trabajar, por lo que las actividades se reducen y concentran.
Por otro lado el tiempo no ha sido bueno del todo, con tres días de lluvias que han reducido mucho los días de actividad en el campamento.
Nataly

Como decimos el principal objetivo era continuar la exploración en la FO1, una sima situada en lo más intrincado del lapiaz al sur de Peña Rocias y que precisa hora y media de marcha desde el campamento, por un terreno complicado.














Empieza con un bonito pozo de 80 m. de amplias dimensiones, en cuyo fondo una rampa de piedras termina en un cruce y de nuevo en rampa, a la izquierda llegamos a un hueco, sobre el que una pequeña chimenea, fue escalada hasta una sala alta de suelo cubierto de piedras. Al fondo de la salita una fisura descendente tragaba aire claramente.


Llevamos tres años trabajando en la ampliación de esta fisura y finalmente este año se alcanzó un pozo vertical de 10 m., en cuyo fondo de nuevo otra fisura cerraba el paso.
Los trabajos se vieron finalmente detenidos por la avería del taladro, lo que puso fin a las actividades en esta sima por este año.
Se desequipó la sima y quedará pendiente para el próximo año.

Los trabajos de prospección este año se centraron en la ladera sur de Peña Rocias, donde en el pasado trabajaron grupos franceses y el Niphargus.
Revisamos la sima RC2, con un gran pozo de 80 m. y otro paralelo que resultó tener solo 25 m.






 





Se localizan algunas simas más que se descienden, pero no superan en ningún caso los 40 m. 

Tuvimos que adelantar el final del campamento debido al pronóstico de fuertes lluvias, así que el viernes desmontamos y descendimos a la civilización.

















Nataly

 

martes, 16 de julio de 2019

El inicio del inicio

Sabado 6 de Julio de 2019




La FO1 es una sima que localizamos en 2017 durante la campaña de Ffria, se encuentra en un intrincado lapiaz, con un pequeño cañón que en uno de sus laterales tiene esta boca de unos 7 m. de diámetro. Se trata de un largo pozo de casi 80 m., en cuyo fondo una rampa de piedras, conduce a un hueco que parece ser el final de la sima. Pero Bernard realizó una delicada escalada, seguida de una desobstrucción aun más delicada, que le llevo a una sala alta, que en su fondo tenía una estrecha fisura que tragaba aire. En 2017 se iniciaron los trabajos de desobstrucción que continuaron en la campaña de 2018, aunque no se pudo dedicar mucho tiempo a la tarea.
La sima permaneció equipada en espera de alguna salida posterior, que finalmente no se produjo.
Este sábado decidimos por fin acercarnos desde el Crucero, aprovechando el pronóstico de buen tiempo, aunque también anuncian tormentas.
 Nos juntamos los Castreños, Cristobal y yo en el club para recoger el material de desobstrucción, hacemos parada de avituallamiento en la Gándara y sobre las 11:00 estamos saliendo desde el Crucero, con mucho bochorno a pesar de que esta algo nublado. Nos lleva casi dos horas llegar a la boca con una parada intermedia en la fuente.

Me equivoco en el tramo final del camino y acabamos llegando a la zona por otro sitio más laborioso. Comemos algo y Zape decide probar el taladro que nos ha dado algún disgusto. Mierdaaa, el puñetero taladro no percute a pesar de perrerías varias que le hacemos. Probando con otra broca más corta parece que se engancha y comienza a funcionar.
Con bastante escepticismo nos equipamos y trepamos hasta la cornisa que bordea el cañón, hasta un paso que permite descender a su fondo y cruzar hasta la entrada de la sima. Comprobamos la cuerda que parece estar en buen estado.
Zape y Cristobal van en punta y Marta y yo haremos topo con el topodroid, para hacernos una idea en directo de la dirección de la desobstrucción, por si se acerca mucho al pozo, no sea que terminemos llegando al mismo pozo.

Los primeros metros con tanta luz no dejan ver el punto del laser y nos dan trabajo, luego es más fácil y vamos saltando de fraccionamiento en fraccionamiento. También hacemos alguna foto de las paredes húmedas que reflejan el sol.

Llegamos a la zona de trabajo donde los obrerazos ya están en la faena, peleándose por jugar con el taladro, que parece se digna a funcionar. El trabajo cunde ya que la roca es dura y se fractura bien con el puntero y hay huecos donde alojar el material que se desprende. Con unas horas de trabajo, llegamos a lo que parece una vertical de unos 10 m., pero aun la cabecera es estrecha, por lo que le asignamos la misión a la más ágil, grácil, y simpática del grupo…Además somos unos caballeros y “las mujeres primero”.
Como no hemos traído anclajes, decidimos empotrar al gordo del grupo en la fisura y que Marta se cuelgue de él con la única cuerda que nos queda. Por tanto me coloco en posición y me ato la cuerda al arnés, mientras Marta se cuela por la cabecera y la muy incauta se cuelga de la cuerda confiada. Menos mal que es una sílfide y mis largas jornadas de filete con patatas han formado un buen contrapeso.
Llega al fondo del pozo, que dice no es muy estrecho. Abajo una pequeña salita y una estrechez por la que se cuela el aire. No parece fácil y el trabajo será duro.
El día esta terminado y Marta sale del pozo sin inmutarse, recogemos las cosas y nos vamos hacia el exterior que son las fiestas del Mantón y hay que hidratarse.
Vamos ascendiendo el pozo y en la calle, la niebla cubre la zona aunque sigue haciendo bastante calor. Salimos del lapiaz por la cornisa y llegamos a las mochilas, donde nos quitamos los trastos y cargamos las cosas.
Son las 19:00 y nos queda un buen paseo hasta el coche, pero lo hacemos bastante más rápido y en una hora y cuarto estamos. Nos cambiamos y derechos al bar de la Gándara, donde un Kalimocho es devorado en pocos segundos. Luego pedimos cena y más satisfechos nos vamos para Ramales, que Marta se ha traído mantón y quiere lucirlo.
La FO1 será objetivo claro del Ffria 2019, veremos…