Sábado 28 Mayo de 2022
Disfrutamos de unos días de calor veraniego, que nos animan a meternos bajo tierra, pero estamos solo tres, para hacer alguna actividad. La semana ha sido dura para Zape y el yo tengo un dedo del pie incordiando, así que cambiamos los planes iniciales de ir a Cubillones, por otro mucho mas relajado, como es Cullalvera.
Cafetito en el Willy´s y con mucha calma, nos acercamos a la cueva para entrar con la segunda visita de los guías, es decir casi a las 11:00 horario turístico total.
Marta y Zape me cuentan su último viaje en bicicleta por la ruta de los castillos en Portugal, y casi me canso solo de oírlos, no me extraña que hoy prefieran algo suave..
El deslizante barro de la zona de los lagos es el único obstáculo reseñable para el día de hoy, luego trepar por algunos bloques, hacia la parte alta de la galería de las Pozas y en media hora estamos en la base de la cuerda, que llega desde la galería colgada, a la que llegaron Marta y Cristóbal en nuestra última visita a este bonito agujero del monte del Moro.
Ascendemos como perezosos por la cuerda y 35 m. mas arriba llegamos a la galería, en forma de diaclasa inclinada con estrechos tubos en su parte izquierda y un amplio tubo que desciende primero como rampa y después en vertical. Este tubo-pozo es el primer objetivo de hoy, aunque con casi total seguridad volverá a salir sobre la sala de la que partimos.
Mientras los castreños equipan, yo subo a los tubos y me arrastro por uno hasta llegar a una salita formada por la diaclasa inclinada y cortado por otro pozo, que tiene pinta de estar sobre el que bajan los colegas.
De vuelta me asomo por otro tubo a una salita desfondada que enfrente tiene una rampa larga a unos tubos superiores.
Vuelvo con los otros y empiezo la topo mientras desciendo. Zape que va en punta ha descendido y como esperábamos, ha llegado a la sala de abajo, aunque arriba hay una repisa de bloques y lo que parece otro pozo también a la sala.
De subida Zape se desplaza por los bloques y confirma que el
pozo vuelve también a la sala.
Foto Marta |
Desequipamos el tubo
y dedicamos un ratito a consumir las viandas que hemos traído.
Luego mientras sigo con la topo, Marta se prepara para hacer la escalada a la rampa, asegurada por Zape. Cuando vuelvo de las tareas topográficas, Marta está arriba montando una reunión.
Foto Zape |
Foto Marta |
Subimos los chicos desequipando la escalada y con la topo, revisamos los tubos que hay en lo alto, pero ninguno continúa y solo nos queda bajarnos de allí.
Zape hace un abalakov y nos descolgamos uno tras otro, recuperamos la cuerda y damos por terminada la exploración en esta parte de la cueva.
Se ha necesitado un gran esfuerzo para llegar hasta allí y los frutos han sido pobres, pero la exploración es así y debemos asumirlo y pensar ya en el siguiente objetivo.
Aun nos queda desmontar la instalación de acceso y recuperar las cuerdas, cosa que completamos sin incidentes.
Descendemos a la base de la sala e inspeccionamos en amplio cañón que parte de allí sobre la galería habitual de Cullalvera, donde vemos huellas de otros exploradores del pasado.
Cargamos las sacas y nos dirigimos a la boca, donde llegamos a las 16:30 y charlamos un rato con la guía, antes de volver al coche y al calor que hace en la calle en este verano adelantado.
Ha sido un día tranquilo de exploración, cosa que también viene bien de vez en cuando, sobre todo cuando tienes ya mas años que Carracuca..
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